«Las causas de faltar gente en España son muchas. Las antiguas (conocidas aun de los extranjeros) son pestes, guerras, hambres, y muchas expulsiones de Arrianos, Moros, Judíos, y otros infieles, que hicieron los señores Reyes de España. La segunda, las guerras de Nápoles, Sicilia, Milán y Flandes, y otras muchas que ha tenido España. La tercera, las colonias, presidios, y poblaciones que tiene y ha tenido en tan anchas Indias Orientales y Occidentales, y fuerzas de África. De las cuales causas nace agotarse la gente (…) Pero nueva causa de faltar gente hay, porque el año de 1600 se advirtió a V.M. gran falta de ella, y el de 1601 hubo peste, y el de 1609 la expulsión de más de cuatrocientos mil Moriscos y la mayor se conoce pocos años acá, de modo que los curas dieron un memorial a Toledo, en que advirtiesen que falta la tercera parte de la gente (y aun hay quien dice que falta de tres partes de ella las dos) y dicen que en la carnicería se pesa menos de la mitad de la carne que solía....